Con estos datos, la situación de José María no deja de complicarse. Cuando estoy bailando con los jóvenes, tengo que estar a la vez observando, acordándome de todos los detalles, y participando, bailando, dejándome llevar por la situación. Así, no sólo daré cuenta aquí de la juventud patambeña tal como la conocí en 2005, sino que complemento mis observaciones con las notas de campo recopiladas a lo largo de los últimos años.