Previamente, solo se habían disputado torneos internacionales entre las selecciones de Argentina y Uruguay, en la Copa Newton, la Copa Lipton o la Copa Honor Argentino. La marca inglesa se mantendría en el equipo embajador hasta mediados de 1995 donde, según se afirma, por incumplimiento de contrato este se rompería entre ambas partes dando el regreso de Torino. David Bracuto fue nombrado Presidente de la AFA en 1974 y le ofreció a César Luis Menotti el cargo de entrenador, que Menotti aceptó bajo varias condiciones, entre ellas la condición de que los jugadores argentinos menores de 25 años no debían ser vendidos a clubes extranjeros.